
La violación de la tumba fue descubierta cuando familiares de Papo acudieron al cementerio con motivo del Día de los Fieles Difuntos. Al llegar notaron que la tumba había sido abierta y al revisar el ataúd la cabeza no estaba. De inmediato se avisó a las autoridades de Montecristi que iniciaron una investigación para determinar quienes fueron los autores del macabro hurto. Se supo que al conocer de la profanación de la tumba, su hermano Raulín ordenó sepultar nuevamente los restos y reforzar el nicho a fin de evitar que sea violentado nuevamente.
Papo Rodríguez, de 32 años de edad , hermano menor de Raulín, falleció en un accidente de tránsito que provocó conjeturas de sus familiares quienes sostenían que a él lo golpearon y luego lo metieron en un automóvil. La información fue publicada por el digital Ensegundos.net.
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