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sábado, 31 de julio de 2010

Baja en recaudación levantó sospechas

SANTIAGO. La reducción de las recaudaciones en la regional Norte de Aduanas, fue lo que dio paso a la investigación para establecer el motivo de esa situación, concluyéndose en que se estaba produciendo un desfalco. Tres empleados se encuentran detenidos.

Así consta en el expediente mediante el cual la fiscalía solicitó la medida de coerción contra Adalberto Rosa Rosario, Miguel Ángel Lazala Cabrera y Herald Estévez Peña, contra quienes se dictó la noche del jueves ocho meses de prisión.

El documento establece que el director general de Aduanas, licenciado Rafael Camilo, al percatarse que había un descenso del 70 por ciento de las recaudaciones, decidió ordenar una investigación.

Del alegado fraude, establecido en la acusación que ronda los 138 millones de pesos, es señalado como principal responsable a Rosa Rosario, sub administrador operativo segundo de esa dependencia en la zona Norte y quien fue cancelado el 20 de julio por alegadamente haber abandonado su trabajo.

Los involucrados en el fraude aduanal deberán enfrentar cargos por asociación de malhechores, tráfico internacional de armas, contrabando y uso de documentos falsos, desfalco y lavado de activos con circunstancias agravantes, en sus condiciones de funcionarios públicos.

En la pieza acusatoria se asegura que pudo comprobarse que al país estaban entrando armas de alto calibre y gran cantidad de dinero en efectivo “ya que algunas empresas, al saber que no iban a ser revisados sus contenedores por el peaje que pagaban, se estaban dedicando al tráfico de dinero y armas de fuego”.

Puntualiza que los tres inculpados alegadamente cobraban 15 mil pesos por cada tanque que no revisaban “actividad dolosa por la que recibían mensualmente alrededor de 915 mil pesos”, lo que les permitía exhibir “una bonanza económica que no se correspondía con sus salarios”.

En las averiguaciones internas que en principio ordenó el licenciado Camilo, actuaron el primer teniente Melenciano Acevedo Figueroa y el sargento mayor Pedro Mendoza, quienes comprobaron la irregular práctica, según consta en el expediente.

En las requisas practicadas el pasado martes en las residencias de los involucrados fueron incautadas varias pertenencias de los tres jóvenes, incluyendo celulares donde, según la pieza acusatoria “existen mensajes comprometedores”.

En el expediente se hace alusión al interrogatorio a que fue sometido la mañana de ese día Santiago Felipe Peralta, director regional de Aduanas, quien habría dicho que tenía conocimiento sobre la forma como operaba la alegada mafia y que había tratado de solucionar los problemas, pero que por razones políticas no había podido hacerlo. Se consigna una empresa “mudancera”como la más beneficiada.

Los que faltan

Por ese hecho se persigue a José Ignacio Zapata, presidente de la referida empresa quien, al momento de ser requisado el negocio, se encontraba fuera del país y no ha regresado. De acuerdo a los investigadores, la empresa “mudancera” que mayor beneficio económico logró con la operación del grupo fue “Papo Shipping”, con sede en Esperanza.

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