Escrito por Daniel Bukszpan
Especial CNBC.com
En el 2008, el sindicato de la NBA señaló que el 60 por ciento de todos los jugadores de baloncesto se iban a la quiebra a cinco años de su retiro.
No es difícil ver el por qué. Lo que llega fácil, fácil se va y eso pasa mucho entre los atletas profesionales.
Mientras muchos invierten su dinero de manera sensata, otros queman sus múltiples millones en carros de lujo, joyas y mansiones y cuando los cheques dejan de entrar, se quedan sin nada.
Aquí hay unos cuantos casos de atletas que perdieron más de US$800 millones en poco tiempo.
Latrell Sprewell. El baloncestista apareció en los titulares al tratar de ahorcar a su coach P.J. Carlesimo y lo suspendieron por 68 partidos.
A pesar de eso, tuvo una larga carrera que le produjo casi US$100 millones. Luego de recibir una oferta de US$30 millones por tres años y rechazarla en el 2005, Sprewell se quedó sin trabajo. Para el 2007, los embargos se quedaban con todas sus posesiones.
Lenny Dykstra. Fue un tres veces jugador Estrella que jujgó con los Mets y los Filis. Apodado “Clavos”, llevó a los Mets al campeonato en 1986.
Después de retirarse, se convirtió en un “gurú financiero” pero ya en el 2009, sus derroches lo habían acabado. Tenía US$50 millones en deudas y solo US$50 mil en activos.
Mike Tyson. Por mucho tiempo, ningún boxeador en el mundo era más temido que él. El poderoso Tyson ganó sus primeras 19 peleas profesionales por nocaut, varios de ellos en el primer round. Rápidamente se convirtió en campeón, pero en 1992 fue condenado por violación y cumplió tres años en prisión. Al salir de la cárcel, nunca encontró su verdadero ritmo y después de arrancarle una oreja a Evander Holyfield con una mordida, Tyson fue descalificado y nunca ganó otro campeonato.
El dinero no debería ser un problema, con US$400 millones en ganancias, pero en el 2003 se declaró en bancarrota y alegó tener deudas por m´s de US$27 millones, incluyendo US49 millones por su último divorcio y US$13 millones en Impuestos Sobre la Renta, algo verdaderamente incomprensible.
Zoom
Otros casos
Kenny Anderson ganó unos US$60 millones. Se casó tres veces y su primer divorcio le costó muy caro. Su esposa Tami Akbar se quedó con la mitad de sus bienes y con una pensión de US$8,500 mensuales. Para celebrar su victoria en la corte, Akbar se mandó a hacer una placa para su carro que decía “SUDINERO”
Michael Vick
El quarterback jugó para los Falcons y tuvo un contrato de seis años y US$62 millones, tres años después le dieron una extensión de 10 años y US130 millones. Pero en el 2007 fue enviado a prisión por peleas ilegales de perros y mientras estuvo en prisión se declaró en bancarrota además de perder sus patrocinios.
Michael Vick
Futbolista NFL
Por sus problemas legales de peleas de perros ilegales, perdió más de US$200 millones.
Mike Ttyson
Boxeador
Ganó más de US$400 millones en su carrera, y debía US$27 millones en el 2003.
Latrell Sprewell
Baloncestista
Rechazó un contrato de US$30 millones por ser muy poco y después lo perdió todo.
Kenny Anderson
Baloncestista
Varios divorcios y seis hijos que mantener acabaron una fortuna de US$60 millones.
Jenny Dykstra
Pelotero
Su vida alocada, malas inversiones y diversos vicios lo llevaron a la bancarrota.
Lawrence Taylor
Futbolista NFL
Ganó un premio al JMV y fue uno de los grandes en dinero en los 80, pero fracasó.
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