SANTIAGO.- Un niño de nueve años de edad desapareció esta tarde luego de caer junto a otros dos menores en una alcantarilla desbordada por los aguaceros en el barrio La Gloria del sector Cienfuegos de esta ciudad.
Según testigos los tres menores cayeron en la alcantarilla cuando se bañaban en el lugar, pero dos de los adolescentes lograron ser rescatados por varias personas.
El subdirector de la Defensa Civil, Francisco Arias Tolentino informó que varias brigadas de rescatistas de ese organismo rastrean a Cienfuegos y zonas aledañas en busca del menor desaparecido.
En otro orden unas 60 viviendas resultaron afectadas en el Distrito Municipal de Palo Verde, en la Provincia de Montecristi, por el desbordamiento del río Yaque del Norte el cual también a dañado plantaciones agrícolas.
Todas las familias residentes en las viviendas afectadas, tuvieron que recoger sus ajuares y refugiarse en casas de familiares y amigos.
En las riveras del afluente han sido dañadas cosechas de frutos menores y arroz, a punto de ser recolectadas, mientras que en castañuelas están incomunicados con las Matas de Santa Cruz por las inundaciones.
En tanto, la gobernación de Santiago entregó ayer colchones, estufas y otros efectos del hogar a siete familias que perdieron sus ajuares luego que sus viviendas se desplomaran a causa de las lluvias en la Cañada del Diablo en el sector de Cristo Rey de esta ciudad.
Según testigos los tres menores cayeron en la alcantarilla cuando se bañaban en el lugar, pero dos de los adolescentes lograron ser rescatados por varias personas.
El subdirector de la Defensa Civil, Francisco Arias Tolentino informó que varias brigadas de rescatistas de ese organismo rastrean a Cienfuegos y zonas aledañas en busca del menor desaparecido.
En otro orden unas 60 viviendas resultaron afectadas en el Distrito Municipal de Palo Verde, en la Provincia de Montecristi, por el desbordamiento del río Yaque del Norte el cual también a dañado plantaciones agrícolas.
Todas las familias residentes en las viviendas afectadas, tuvieron que recoger sus ajuares y refugiarse en casas de familiares y amigos.
En las riveras del afluente han sido dañadas cosechas de frutos menores y arroz, a punto de ser recolectadas, mientras que en castañuelas están incomunicados con las Matas de Santa Cruz por las inundaciones.
En tanto, la gobernación de Santiago entregó ayer colchones, estufas y otros efectos del hogar a siete familias que perdieron sus ajuares luego que sus viviendas se desplomaran a causa de las lluvias en la Cañada del Diablo en el sector de Cristo Rey de esta ciudad.
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