SAN FRANCISCO DE MACORIS. A cuatro esquinas de la sede del Comando Regional Nordeste de la Policía, cuatro encapuchados penetraron esta madrugada a la residencia de un comerciante de donde se llevaron más de dos millones de pesos en efectivo y prendas preciosas, hirieron a dos policías y escaparon tomando de rehén a la esposa y la hija del negociante.
El comerciante José Manuel Paulino, de 46 años, narró que a las 2:30 de la madrugada los ladrones rompieron los candados de la entrada principal de la residencia, en la calle Las Palmas, en el centro de esta ciudad. Las rehenes fueron dejadas en el callejón de la Calle Nueva.
Paulino narró que los cuatro encapuchados rompieron los candados de la puerta delantera de la residencia, la número 56 de la calle Las Palmas, tras lo cual penetraron al interior, lo encañonaron así como a su esposa y su hija, los colocaron sobre las camas al tiempo que amenazaban con matarlos si no buscaban una fuerte suma de dinero que tenían en la casa.
Los asaltantes buscaron en todos los lugares encontrando 780 mil pesos en efectivo, una pistola Smith And Wesson calibre 9 milímetros, un cofre con prendas de oro, tres relojes Movado y un Rado, valorados en 3 mil dólares cada uno.
Cuando los asaltantes se marchaban, llegó una patrulla de la Policía integrada por el sargento Carlos Manuel Almonte y el cabo Raúl Reynoso Ureña, quienes fueron recibidos a tiros por los encapuchados y lograron herirlos en la región inguinal izquierda y el brazo izquierdo, respectivamente.
Para marcharse de la residencia, los asaltantes se llevaron como rehenes a la esposa del comerciante, Birmania González Guzmán y una hija del matrimonio, de 17 años, a las que dejaron abandonadas en un callejón de la calle Nueva.
En el interior de la vivienda, donde los asaltantes realizaron varios disparos impactando las paredes y cristales, la Policía encontró 23 casquillos y un plomo mutilado calibre 9 milímetros.
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