NUEVA YIORK, EE.UU.-Una madre afroamericana fue acusada por el asesinato de su hijo de 18 años en el apartamento que compartían en la calle 92 Oeste de Manhattan.
Las autoridades arrestaron a Yvonne Hines de 52 años, luego que el padrastro de Sean Hines, la víctima, (18) encontrara el cadáver en un charco de sangre. Está acusada de homicidio luego de haber sido interrogada por los investigadores. Se declara no culpable y gritaba a todo pulmón que ella no mató a su vástago, mientras era conducida al cuartel por la policía.
"No crean nada de lo que dicen", les voceó a vecinos que se quedaron perplejos cuando se enteraron del arresto. Los vecinos dijeron que Hines estuvo golpeando las puertas de varios de ellos para decirles que "algo" le había pasado a su hijo.
"Ella parecía una loca, temblaba y estaba muy nerviosas", relató el vecino Darell Page de 23 años y que vive en un apartamento próximo al de los Hines. La madre y la víctima tenían un historial de violencia familiar.
Los dos fueron acusados de asalto en junio de este año después de pelearse. El hijo golpeó a la madre en la cabeza con un martillo durante ese incidente y la mujer le cortó el rostro al atacante.
El muchacho se graduó recientemente de la secundaria y esperaba ir a la escuela de artes culinarias. Lo describieron como un joven tranquilo al que le gustaba andar en patinetas y jugar baloncesto en su computador.
A la madre la describen como una persona ruidosa que siempre estaba gritando en los pasillos y estrellando la puerta de su apartamento. La acusada no le dio llaves de la vivienda a su hijo y muchas veces lo echaba a la calle.
"Ella lo presionaba para que buscara un trabajo y cuando lo golpeaba, él no hablaba y se sentaba callado. Era muy tranquilo", señaló la vecina Malika Cooper de 21 años de edad.
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