Habían sido dado de baja en forma deshonrosa de la Policía y sometidos a la justicia, hace once meses y 16 días, los dos hombres acusados de matar a tiros a un capitán pensionado, su esposa y a un hijo de ésta.
Modesto Esmerling González Quezada (Blondy) y Esterling Reynoso Rosario (El Chino), fueron sacados de la Policía por el actual jefe de la institución, mayor general José Polanco Gómez.
Los dos hombres están acusados de asesinar al capitán pensionado de la Fuerza Aérea Luis Alfonso Herasme Tejeda, de 48 años, a su esposa Kirsy Joselin Rodríguez Féliz, de 39 y a su hijastro Carlos Miguel Rodríguez, de 18 años.
Según consta en los archivos de El Nacional, Blondy y El Chino fueron entregados al fiscal de la provincia de Santo Domingo, doctor Perfecto Acosta, el 30 de junio del 2011, mediante un oficio remitido por el general Víctor Manuel Campusano Jiménez, subjefe de la Policía.
Otros detenidos en torno al caso son Esmil Díaz Perdomo (El Menor), quien alquiló la pistola a Reynoso Rosario con la cual se cometió el crimen; y Alfredo Sánchez Mordán (El Bronco), por haberla guardado luego del triple asesinato.
La Policía busca a Juan Carlos Ovalle Rodríguez (Pototo), quien trasladó las armas a la casa de El Bronco.
La Dirección de Investigaciones Criminales determinó que el crimen fue planificado en el billar El Trébol, en la calle Rodeo a esquina Restauración, del sector Almirante-Caña, que administra Reynoso Rosario.
Hace casi un año los dos agentes fueron dados de baja en forma deshonrosa y sometidos a la justicia tras comprobarse que se dedicaban a asaltar colmados donde robaban dinero, whiskies y máquinas tragamonedas.
La Jefatura de la Policía comprobó que el 15 de marzo del 2011 los dos policías asaltaron el colmado Guzmán, en la calle Primera número 5 del sector El Almirante, propiedad de Ruddy Manuel N´çuñez Cabrera.
Igualmente se comprobó que el 27 de junio del 2011 asaltaron el colmado El Chino, en la calle 10-W de Los Prados del Cachón, propiedad de Heriberto Silverio Hinojosa, donde igualmente robaron dinero, bebidas alcohólicas y máquinas tragamonedas.
En esas acciones se hacían acompañar del cabo Odel Rodríguez Medina, quien también fue dado de baja en forma deshonrosa y sometido a la justicia.
El caso fue resuelto cuando oficiales investigadores que procesaban la escena del crimen, hallaron a más de ochocientos metros, un casquillo, el cual también fue levantado cumpliendo con el protocolo establecido para tales fines.
Ese casquillo arrojo coincidencia con los otros colectados en el mismo lugar donde fueron cometidos los crímenes, pero no tenía el indicio de haber sido disparado esa misma noche.
De inmediato los investigadores obtuvieron la información de que el jueves 10 de este mes, un tal Esmerlin, supuestamente estuvo disparando por esos predios, información que lo colocó en el circulo de la sospecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario