NUEVA YORK.- Víctor de León, un dominicano que
amenazó con contagiar de SIDA a un hombre con una jeringuilla durante un
asalto, y en compañía de un compatriota identificado como Víctor
García, fue condenado a entre 2 a 4 años de prisión, luego de declararse
culpable de un delito grave de robo a mano armada.
La sentencia fue el resultado de un acuerdo con los fiscales. El expediente sostiene que de León y García entraron juntos a una tienda de ventas de sierras, donde hizo la amenaza a uno de los dependientes del negocio.
Con la aguja en mano le dijo al empleado que tiene SIDA y le advirtió que lo inyectaría para contagiarlo. García y de León intentaron robarse varias sierras, pero el empleado les hizo fuerte resistencia y los ladrones huyeron en un vehículo, cuya matrícula fue captada por testigos que llamaron a la policía.
En la corte, los fiscales dijeron que de León amenazó a García en el establecimiento comercial del poblado Salem, por lo que el amenazado salió corriendo y muy asustado.
El acusado es un adicto a las drogas y se le ordenó someterse a un programa de rehabilitación.
Fue detenido en la calle Cedar, un día después que hiciera la amenaza y su imagen apareciera en la cámara de seguridad de la tienda.
Si no hubiera firmado el acuerdo con los fiscales, en un juicio enfrentaba entre 7 y 15 años en la cárcel por robo.
La sentencia fue el resultado de un acuerdo con los fiscales. El expediente sostiene que de León y García entraron juntos a una tienda de ventas de sierras, donde hizo la amenaza a uno de los dependientes del negocio.
Con la aguja en mano le dijo al empleado que tiene SIDA y le advirtió que lo inyectaría para contagiarlo. García y de León intentaron robarse varias sierras, pero el empleado les hizo fuerte resistencia y los ladrones huyeron en un vehículo, cuya matrícula fue captada por testigos que llamaron a la policía.
En la corte, los fiscales dijeron que de León amenazó a García en el establecimiento comercial del poblado Salem, por lo que el amenazado salió corriendo y muy asustado.
El acusado es un adicto a las drogas y se le ordenó someterse a un programa de rehabilitación.
Fue detenido en la calle Cedar, un día después que hiciera la amenaza y su imagen apareciera en la cámara de seguridad de la tienda.
Si no hubiera firmado el acuerdo con los fiscales, en un juicio enfrentaba entre 7 y 15 años en la cárcel por robo.
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