El temible exjefe de sicarios del fallecido capo Pablo Escobar recobró el martes la libertad tras permanecer encarcelado unos 23 años por cargos relacionados con homicidios y secuestros.
Fuertemente custodiado, John Jairo Velásquez Vásquez, alias Popeye, abandonó en horas de la noche el penal de alta seguridad del municipio de Cómbita, en el departamento de Boyacá, según informó la oficina de prensa del instituto carcelario del país.
En el esquema de seguridad participaron 5 camionetas y cerca de 200 policías que lo transportaron a la ciudad de Bogotá. La medida de libertad condicional para el condenado es de 4 años y 4 meses.
Como requisito para que conserve la libertad condicional tendrá un periodo de prueba de 52 meses durante los cuales no podrá abandonar el país y tendrá que presentarse ante los despachos judiciales que puedan requerirlo.
John Jairo Velásquez dejó la cárcel en la que estuvo 22 años. Tendrá 52 meses de libertad condicional.
Velásquez, condenado a 30 años de cárcel por el asesinato de Galán, reconoció haber cometido 300 asesinatos y coordinado unos 3.000 mientras fue jefe de los sicarios del extinto Cartel de Medellín.Un juez de la capital boyacense había ordenado el viernes pasado la libertad del que fue uno de los principales colaboradores de Escobar, antes de cumplir los 26 años que se le impusieron luego de confesar, entre otros crímenes, su participación en el asesinato del candidato presidencial Luis Carlos Galán, quien murió baleado el 18 de agosto de 1989.
Cometió escalofriantes crímenes
A las órdenes del abatido Pablo Escobar, Popeye también participó en el secuestro del expresidente Andrés Pastrana (1998-2002), cuando postulaba a la alcaldía de Bogotá, y el del exvicepresidente Francisco Santos, cuando era jefe de redacción del diario El Tiempo.
El sicario, que ha relatado una y mil veces a los medios crímenes escalofriantes, como el de su propia novia a la que tuvo que matar por orden de Escobar, estaba privado de libertad desde el 8 de octubre de 1992.
Después de 24 años, Andrés Pastrana visitó en una cárcel colombiana a su secuestrador, alias Popeye del Cartel de Medellín.
Además de su condena por el crimen de Galán, a Velásquez se le sentenció en un segundo proceso por narcotráfico a 12 años de prisión en 2008. Sin embargo, el juez Rodríguez decidió "conceder redención de pena" por la acumulación de días de trabajo y estudio.
"En Colombia la gente nunca paga la pena completa. Si el preso trabaja o estudia por cada día que pase preso se le descuenta uno", dijo a la AFP el abogado penalista de la Universidad Javeriana, Fabio Humar.
Además, Velásquez colaboró con la justicia para esclarecer otros crímenes. "Ha aportado a la verdad en estos años", dijo el senador Carlos Galán, uno de los hijos del político asesinado, aludiendo a su colaboración para condenar al exsenador liberal y exministro Alberto Santofimio por la muerte de su padre.
Teme por su seguridad
Ante la inminente posibilidad de recobrar su libertad, Popeye solicitó "de puño y letra" a la Defensoría del Pueblo garantizar su vida.
Exhiben las armas más utilizadas por los sicarios del cartel de Medellín encabezado por su líder principal, Pablo Escobar
"Por favor me brinde la policía seguridad desde la puerta del penal", escribió en una carta. Según la Policía, un operativo con más de 40 agentes escoltará a Velásquez hasta la residencia que indicó en Bogotá.
Andrés Villamizar, director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), negó que este cuerpo, que protege a expresidentes y otras personas cuyas vidas corren riesgo por sus funciones, le vaya asignar posteriormente guardaespaldas a Velásquez.
Sin embargo Villamizar, sobrino de Galán e hijo de Maruja Pachón, secuestrada por Velásquez, escribió en Twitter: "Mi familia y yo somos víctimas directas de alias Popeye. Pero si alguien en Colombia ha pagado, es él".
No hay comentarios:
Publicar un comentario