Las autoridades garantizaron este sábado la integridad física de la reclusa Mary Peláez, y aclararon que fue porque en los pacillos del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva había un perfume que olía a flores fúnebres, que ella dijo que sentía olor a funeraria.
La expresión de Peláez se produjo ayer cuando junto a otros implicados en el caso José David Figueroa Agosto, la conducían al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva para notificarle las pruebas que la Fiscalía del Distrito Nacional dice tener contra ella.
El licenciado Roberto Santana, director de la Escuela Penitenciaria y del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciario, dijo que las autoridades de la cárcel de Najayo-Mujeres procedieron de inmediato a interrogar a Peláez sobre esa expresión y que ella declaró que lo había dicho, porque cuando ingresó al Palacio de Justicia de Ciudad Nueva había en los pasillos un olor que le recordaba a las funerarias.
Precisó que Peláez dijo durante el interrogatorio que le hicieron en Najayo, que se trató de un comentario personal, y no de ningún tipo de declaración de prensa, sino de “un simple comentario dentro del anillo de seguridad”.
Sobre el particular, también fue consultado el director general de Prisiones, general retirado Manuel de Jesús Pérez Sánchez, quien pese a remitir a este redactor a donde Roberto Santana, garantizó la seguridad de todos los reclusos, incluyendo la de Mary Peláez.
“Me huele a funeraria", dijo Peláez cuando en medio de un apretado dispositivo de seguridad fue conducida por ante el juez suplente del Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, Pilades Hernández Méndez.
"¿No le huele a funeraria?", le preguntó a la custodia, que reaccionó con un gesto de sorpresa.
La implicada en el expediente del prófugo Figueroa Agosto no habló de las razones de lo que percibía su olfato.
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