Una miembro del grupo activista feminista FEMEN con la escritura en su pecho "Que fascistas descansen en el infierno", apunta a su boca con un arma de juguete durante una protesta en la catedral de Notre Dame, en París, por el suicidio de un activista de extrema derecha dentro de ese templo. Un escritor y activista derechista se pegó un tiro ayer delante del altar de la famosa catedral, después de denunciar el matrimonio homosexual y la inmigración.
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