La novia es la hija de la ex embajadora estadounidense ante el Vaticano, una de las principales asesoras del papa Francisco.
La ex embajadora Mary Ann Glendon, profesora de derecho en la
Universidad de Harvard, es una de las mujeres de mayor jerarquía en la
Santa Sede como presidenta de la Academia Pontificia de Ciencias
Sociales. Es también miembro de la comisión de cinco personas formada
por Francisco para reformar el banco del Vaticano, sumido en el
escándalo.
Su hija, Elizabeth Lev, es una historiadora de arte radicada en Roma y columnista de la agencia noticiosa Zenit, operada por la Legión, de la que Williams fue editor durante más de una década mientras estuvo en la orden.
Williams, teólogo moral, escritor, conferencista y personalidad de la televisión estadounidense, reconoció el año pasado que había tenido un hijo varios años antes.
En esa época ofreció disculpas por “esta grave transgresión” a sus votos de celibato y dijo que había seguido siendo sacerdote porque esperaba dejar atrás “este pecado en mi pasado” con el fin de hacer el bien en favor de la Iglesia.
Posteriormente el superior de la Legión, ya jubilado, reconoció que se había enterado del hijo en 2005 pero le permitió a Williams que siguiera enseñando y predicando sobre moral.
Luego de tomarse una licencia de un año para reflexionar, Williams dejó el sacerdocio en mayo con el fin de cuidar a su hijo. De acuerdo con el registro de su boda, él y Lev se casarán el sábado en Estados Unidos.
Cuando se le solicitaron sus comentarios al respecto el jueves, Lev confirmó los planes de matrimonio en un correo electrónico, al tiempo que agregó: “No tenemos intenciones de jamás hacer declaraciones sobre nuestra vida personal en este foro”.
En un principio negó tener una relación íntima con Williams, aunque con frecuencia se presentaban juntos en círculos estadounidenses en Roma, en especial con grupos de estudiantes y turistas católicos de Estados Unidos que visitaban la ciudad.
Su boda cierra una especie de círculo, al tiempo que genera algunas interrogantes incómodas: ¿Quién en la Iglesia, más allá del superior de Williams, sabía acerca del niño mientras la pareja intentaba encubrirlo? ¿Williams ya tenía una relación con Lev cuando ella fue contratada en Zenit? ¿Y los vínculos familiares con Williams influyeron en Glendon en su defensa de la Legión y su fundador caído en desgracia a pesar de los reportes de que éste era un pedófilo?
La saga de la Legión de Cristo representa uno de los ejemplos más flagrantes de cómo el Vaticano ignoró décadas de informes sobre sacerdotes que cometían abusos sexuales, al colocar los líderes de la Iglesia los intereses de la institución por encima de los de las víctimas.
El padre Marcial Maciel fundó la Legión en México en 1941 y supervisó su crecimiento hasta convertirse en una congregación grande y destacada a pesar de los reportes creíbles de que era adicto a las drogas y abusaba de jovencitos. Tras la muerte de Maciel en 2008, la Legión reconoció que fue padre de tres hijos y violaba a sus seminaristas.
En 2010 el Vaticano asumió el control de la orden y un delegado papal ha estado supervisando una reforma y “purificación” de la misma. En enero, la Legión elegirá a un nuevo líder y aprobará una serie de constituciones.
El escándalo de los legionarios ha sido especialmente dañino para la Santa Sede, ya que el papa Juan Pablo II y sus cardenales pusieron a Maciel como un modelo a seguir para los fieles, en momentos en que la orden era admirada por su ortodoxia y su capacidad para recabar dinero y nuevas vocaciones.
Al igual que todos los sacerdotes de la Legión, Williams había defendido firmemente a Maciel. Cuando la doble vida del fundador fue dada a conocer en 2009, Williams declaró al programa católico ETWN que las revelaciones fueron un “golpe muy, muy duro para todos nosotros”.
Mientras estuvo en el ministerio activo, Williams era el sacerdote más prominente en la orden, que tenía 900. Es autor de libros como “Knowing Right From Wrong: A Christian Guide to Conscience” (Como distinguir el bien del mal: una guía para la conciencia cristiana) de 2008, y fue comentarista para la cadena estadounidense CBS. Se desempeñó como superior del directorado general de la Legión en Roma a fines de la década de 1990 y principios de la de 2000.
Su hija, Elizabeth Lev, es una historiadora de arte radicada en Roma y columnista de la agencia noticiosa Zenit, operada por la Legión, de la que Williams fue editor durante más de una década mientras estuvo en la orden.
Williams, teólogo moral, escritor, conferencista y personalidad de la televisión estadounidense, reconoció el año pasado que había tenido un hijo varios años antes.
En esa época ofreció disculpas por “esta grave transgresión” a sus votos de celibato y dijo que había seguido siendo sacerdote porque esperaba dejar atrás “este pecado en mi pasado” con el fin de hacer el bien en favor de la Iglesia.
Posteriormente el superior de la Legión, ya jubilado, reconoció que se había enterado del hijo en 2005 pero le permitió a Williams que siguiera enseñando y predicando sobre moral.
Luego de tomarse una licencia de un año para reflexionar, Williams dejó el sacerdocio en mayo con el fin de cuidar a su hijo. De acuerdo con el registro de su boda, él y Lev se casarán el sábado en Estados Unidos.
Cuando se le solicitaron sus comentarios al respecto el jueves, Lev confirmó los planes de matrimonio en un correo electrónico, al tiempo que agregó: “No tenemos intenciones de jamás hacer declaraciones sobre nuestra vida personal en este foro”.
En un principio negó tener una relación íntima con Williams, aunque con frecuencia se presentaban juntos en círculos estadounidenses en Roma, en especial con grupos de estudiantes y turistas católicos de Estados Unidos que visitaban la ciudad.
Su boda cierra una especie de círculo, al tiempo que genera algunas interrogantes incómodas: ¿Quién en la Iglesia, más allá del superior de Williams, sabía acerca del niño mientras la pareja intentaba encubrirlo? ¿Williams ya tenía una relación con Lev cuando ella fue contratada en Zenit? ¿Y los vínculos familiares con Williams influyeron en Glendon en su defensa de la Legión y su fundador caído en desgracia a pesar de los reportes de que éste era un pedófilo?
La saga de la Legión de Cristo representa uno de los ejemplos más flagrantes de cómo el Vaticano ignoró décadas de informes sobre sacerdotes que cometían abusos sexuales, al colocar los líderes de la Iglesia los intereses de la institución por encima de los de las víctimas.
El padre Marcial Maciel fundó la Legión en México en 1941 y supervisó su crecimiento hasta convertirse en una congregación grande y destacada a pesar de los reportes creíbles de que era adicto a las drogas y abusaba de jovencitos. Tras la muerte de Maciel en 2008, la Legión reconoció que fue padre de tres hijos y violaba a sus seminaristas.
En 2010 el Vaticano asumió el control de la orden y un delegado papal ha estado supervisando una reforma y “purificación” de la misma. En enero, la Legión elegirá a un nuevo líder y aprobará una serie de constituciones.
El escándalo de los legionarios ha sido especialmente dañino para la Santa Sede, ya que el papa Juan Pablo II y sus cardenales pusieron a Maciel como un modelo a seguir para los fieles, en momentos en que la orden era admirada por su ortodoxia y su capacidad para recabar dinero y nuevas vocaciones.
Al igual que todos los sacerdotes de la Legión, Williams había defendido firmemente a Maciel. Cuando la doble vida del fundador fue dada a conocer en 2009, Williams declaró al programa católico ETWN que las revelaciones fueron un “golpe muy, muy duro para todos nosotros”.
Mientras estuvo en el ministerio activo, Williams era el sacerdote más prominente en la orden, que tenía 900. Es autor de libros como “Knowing Right From Wrong: A Christian Guide to Conscience” (Como distinguir el bien del mal: una guía para la conciencia cristiana) de 2008, y fue comentarista para la cadena estadounidense CBS. Se desempeñó como superior del directorado general de la Legión en Roma a fines de la década de 1990 y principios de la de 2000.
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